
Galicia, la tierra de la lluvia y el verde, esconde paisajes increíbles que se disfrutan al máximo sobre dos ruedas. Pontevedra, en particular, ofrece una mezcla única de costa, interior y patrimonio histórico, convirtiéndola en un destino ideal para los amantes del ciclismo. Sus suaves orografías, combinadas con una red de carriles bici en constante expansión, facilitan la práctica de este deporte a ciclistas de todos los niveles.
Descubrir Pontevedra en bicicleta no es solo hacer ejercicio, es una forma de sumergirse en su cultura y conectar con su naturaleza. Desde las Rías Baixas hasta las montañas del interior, cada ruta ofrece una experiencia diferente, llena de aromas, sabores y vistas inolvidables. Prepárate para pedalear entre viñedos, bosques de eucaliptos y pintorescos pueblos marineros.
La Ruta de las Rías Baixas
La Ruta de las Rías Baixas es, sin duda, uno de los atractivos cicloturísticos más populares de Pontevedra. Recorre la costa atlántica, pasando por localidades como Cambados, O Grove y Sanxenxo, ofreciendo impresionantes vistas al océano. Es una ruta relativamente llana, ideal para familias y ciclistas que buscan un recorrido tranquilo.
Esta ruta no solo ofrece belleza paisajística, sino también una oportunidad para deleitarse con la gastronomía local. A lo largo del camino encontrarán restaurantes especializados en marisco fresco y degustaciones de vino Albariño, la joya culinaria de la región. No duden en parar a probar las delicias locales.
Con una longitud aproximada de 70 kilómetros, se puede dividir en etapas más cortas para disfrutarla al máximo. Es importante llevar ropa adecuada para la lluvia, ya que el clima gallego es impredecible, y protector solar, ya que el sol también puede brillar intensamente.
El Camino Portugués a su paso por Pontevedra
Una experiencia única es recorrer alguna etapa del Camino Portugués en bicicleta, una ruta milenaria llena de historia. El tramo que atraviesa Pontevedra es especialmente bonito, discurriendo por una mezcla de pistas forestales y carreteras secundarias, evitando el tráfico pesado.
La ruta discurre por paisajes rurales, pasando por iglesias románicas, pueblos medievales y monasterios con encanto. La atmósfera de peregrinación se respira en cada rincón, ofreciendo una experiencia enriquecedora y espiritual. Se pueden encontrar albergues para ciclistas a lo largo del camino.
La dificultad de esta ruta es moderada, con algunas subidas y bajadas que requieren un mínimo de preparación física. Es fundamental llevar un mapa o GPS para seguir las indicaciones del Camino, así como agua y comida suficiente para las etapas.
La Vía Verde de O Salnés
La Vía Verde de O Salnés es un antiguo trazado ferroviario reconvertido en una ruta cicloturística segura y accesible. Atraviesa el corazón de la comarca de O Salnés, pasando por viñedos, campos de cultivo y pequeños pueblos con encanto. Es una opción fantástica para un paseo tranquilo en familia.
El terreno es principalmente llano, lo que facilita el pedaleo a ciclistas de todos los niveles. A lo largo de la ruta encontrarán áreas de descanso y zonas de picnic, perfectas para hacer una pausa y disfrutar del entorno. La vía está bien señalizada y cuenta con servicios básicos.
Con una longitud de alrededor de 30 kilómetros, es una ruta ideal para una jornada completa. Se puede realizar en ambas direcciones, aunque es recomendable comenzar en Cambados para aprovechar las vistas de las Rías al final del recorrido.
Subidas desafiantes al Monte Xiabre

Para los ciclistas más experimentados, el Monte Xiabre ofrece un reto emocionante. Esta ascensión es una de las más exigentes de Pontevedra, con rampas pronunciadas y curvas cerradas. La recompensa es una vista panorámica espectacular.
La subida requiere una buena condición física y una bicicleta adecuada. Es crucial llevar marchas bajas y gestionar el esfuerzo para llegar a la cima sin agotamiento. La carretera puede estar concurrida en fines de semana, por lo que es importante conducir con precaución.
Desde la cima del Monte Xiabre se puede disfrutar de una vista impresionante de las Rías Baixas, la Isla de la Toja y el interior de Pontevedra. Es un lugar perfecto para hacer una foto memorable y celebrar el logro.
Rutas por el interior: Corón y sus alrededores
Aventurarse por el interior de Pontevedra nos permite descubrir paisajes menos conocidos pero igualmente sorprendentes. La zona de Corón, con sus bosques de eucaliptos y sus pueblos de piedra, ofrece rutas perfectas para los amantes del ciclismo de montaña.
Estas rutas suelen ser más técnicas, con senderos estrechos, terrenos irregulares y subidas y bajadas pronunciadas. Es fundamental contar con una bicicleta de montaña en buen estado y llevar casco, guantes y gafas de protección. Es importante conocer las habilidades propias y elegir una ruta acorde.
La tranquilidad y el contacto con la naturaleza son las principales virtudes de estas rutas. Podrán disfrutar del canto de los pájaros, del aroma de los bosques y de la belleza de la arquitectura tradicional gallega.
Conclusión
Pontevedra es un destino de cicloturismo que tiene algo para todos los gustos y niveles. Desde las rutas costeras y tranquilas hasta las ascensiones desafiantes y los caminos de interior, la oferta es variada y completa. Es una tierra que invita a ser descubierta a ritmo de pedal.
Planificar una ruta en bicicleta por Pontevedra es una excelente manera de explorar la belleza de Galicia de forma sostenible y saludable. Recuerden llevar el equipo adecuado, consultar las previsiones meteorológicas y disfrutar de la experiencia al máximo. ¡A pedalear!