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Cómo llegar a los pazos más remotos de A Coruña

27/02/2025
Una mansión sombría

Galicia, tierra de tradiciones, encierra un tesoro cultural y paisajístico que va más allá de sus ciudades vibrantes. Si buscas una experiencia auténtica, alejada del turismo masificado, los pazos y las casas tradicionales gallegas ofrecen una ventana a un pasado rico y a una forma de vida que ha sabido resistir el paso del tiempo. Estos fincas señoriales, a menudo rodeadas de extensos bosques y con un aire de misterio, representan el corazón de la historia y la cultura de la región. Este artículo se centra en cómo descubrir algunos de los pazos más remotos de la provincia de A Coruña, ofreciendo una guía para llegar a estos lugares y sumergirse en su singularidad.

La provincia de A Coruña, conocida por sus playas y su gastronomía, esconde un interior rural de gran belleza y autenticidad. Paz, tranquilidad y el encanto de la arquitectura gallega se combinan en estos espacios, convirtiéndolos en destinos ideales para aquellos que buscan un contacto directo con la naturaleza y con las costumbres locales. Explorar los pazos y casas tradicionales de A Coruña significa sumergirse en un universo de leyendas, recetas ancestrales y paisajes que te dejarán sin aliento.

El Camino a Pedrónche: Un Viaje a Través del Tiempo

Pedrónche es un pazo emblemático de la zona de Boimorte, reconocido por su impresionante arquitectura medieval y su rica historia. Llegar hasta allí requiere cierta dedicación, pero la recompensa es inmensa. El acceso es principalmente en coche, ya que el transporte público es limitado. Desde A Coruña, se recomienda tomar la N-6 hacia Ferrol, y tomar la desviación hacia Boimorte. La carretera es sinuosa y empinada, ofreciendo unas vistas panorámicas del Atlántico y de la vegetación circundante.

La dificultad del acceso, paradójicamente, contribuye a la atmósfera de exclusividad y a la sensación de estar descubriendo un lugar escondido. Es importante tener en cuenta que la carretera puede ser irregular en algunas zonas, por lo que se aconseja un vehículo con buena suspensión. Además, existe una pequeña tarifa para acceder al pazo, que se utiliza para su conservación y mantenimiento. Un plan previo y una buena dosis de paciencia son cruciales para disfrutar al máximo de esta experiencia.

Finalmente, una vez en Boimorte, hay que seguir las indicaciones hacia Pedrónche, señalizadas con carteles que indican la dirección. Es recomendable consultar el mapa antes de emprender el viaje, ya que la señalización puede ser escasa en algunas partes del camino. La ruta ofrece la posibilidad de disfrutar de la naturaleza gallega en su estado más puro.

Descubriendo la Arquitectura de Entrelos Vilos

Entrelos Vilos es otro pazo que destaca por su particular configuración arquitectónica, rodeado de un impresionante conjunto de “vilos” (erosiones de piedra caliza) que le confieren un aspecto casi mítico. Para llegar, se recomienda tomar la carretera que conecta Cariño con Baio, y luego, seguir las indicaciones hacia Entrelos Vilos. El camino es relativamente sencillo, aunque puede ser algo complicado en condiciones de lluvia o niebla debido a la humedad y la falta de visibilidad.

La estructura del pazo, construida a lo largo de varios siglos, refleja la evolución de los estilos arquitectónicos gallegos. Sus muros de piedra, sus ventanas ojivales y sus tejados de pizarra contribuyen a crear una imagen imponente y señorial. Los vilos, formados por la acción del viento y la lluvia, se han convertido en un elemento distintivo del paisaje, proporcionando un escenario único para fotografías y una sensación de grandeza y misterio.

Es importante destacar la importancia de respetar el entorno natural y de no alterar el paisaje. El acceso a los vilos está restringido para evitar su deterioro y proteger la flora y fauna local. Además, es recomendable llevar calzado adecuado para caminar por la zona, ya que el terreno puede ser irregular y resbaladizo. La visita a Entrelos Vilos es una experiencia inolvidable que te transportará a un pasado lejano.

Gastronomía y Sabores del Pazo

Un pazo antiguo y misterioso cautiva

Una visita a un pazo en A Coruña no estaría completa sin degustar la gastronomía local. Muchos pazos ofrecen la posibilidad de disfrutar de comidas tradicionales, elaboradas con productos frescos de la zona. Desde el pulpo a la gallega hasta el lacón con grelos, pasando por la empanada gallega y el marisco fresco, la oferta culinaria es variada y de alta calidad.

Además, algunos pazos organizan catas de vino y de licores caseros, como el licor café o el pacharán. Es una oportunidad para conocer los productos locales y para aprender sobre las técnicas tradicionales de elaboración. La mayoría de los pazos cuentan con terrazas o jardines donde se puede disfrutar de las comidas al aire libre, rodeados de un entorno natural y tranquilo.

No dudes en preguntar a los propietarios sobre los platos estrella del pazo y sobre los productos de temporada. Te sorprenderá la riqueza de los sabores y la autenticidad de la cocina gallega. Acompañar la comida con un buen vino local es una forma perfecta de disfrutar de una experiencia gastronómica única.

Consejos Prácticos para una Visita Exitosa

Antes de emprender el viaje, es fundamental informarse sobre los horarios de apertura de los pazos, ya que estos pueden variar según la época del año y la temporada. En muchos casos, es necesario solicitar una cita previa para visitar el pazo, especialmente durante los fines de semana y los días festivos. Es recomendable reservar con antelación, sobre todo si se viaja en grupo.

Además, se recomienda llevar ropa y calzado cómodos, ya que se caminará bastante y el terreno puede ser irregular. Es importante protegerse del sol, especialmente durante los meses de verano, utilizando sombrero, gafas de sol y crema solar. No olvides llevar una cámara para capturar los paisajes y los momentos inolvidables.

Finalmente, es fundamental respetar el entorno natural y las costumbres locales. No dejar basura, no hacer ruido excesivo y no alterar el paisaje son algunas de las reglas básicas que debemos seguir para preservar la belleza de estos lugares y para garantizar una experiencia agradable para todos. Apreciar la tranquilidad y el encanto de los pazos es parte de la magia de Galicia.

Conclusión

Los pazos y casas tradicionales de A Coruña representan un invaluable legado cultural y paisajístico de Galicia. Descubrir estos espacios es embarcarse en un viaje a través del tiempo y de las costumbres locales, un encuentro con una forma de vida que ha sabido resistir el paso de las décadas. La dificultad del acceso, lejos de ser un obstáculo, contribuye a la autenticidad y al encanto de estos lugares, que ofrecen una experiencia única y diferente a la de los destinos turísticos masificados.

En definitiva, una visita a un pazo en A Coruña es una oportunidad para conectar con la esencia de Galicia, para disfrutar de su belleza natural y para sumergirse en su rica historia. Si buscas una experiencia auténtica, alejada del bullicio de la ciudad, los pazos y casas tradicionales te esperan con los brazos abiertos, listos para compartir su magia y su encanto. No dudes en explorar estos tesoros escondidos y descubrir la verdadera Galicia.